Àngels Barceló se estrena hoy al frente de Hora 25, en la Cadena SER

Hoy Hora 25, el programa informativo y de tertulia de la Cadena SER, cambia de voz y de hora. A partir de las 8 de la tarde y hasta las 12, Àngels Barceló tomará el relevo del fallecido Carlos Llamas en el programa líder de la franja en que se emite.

Este nuevo horario responde a la necesidad de la emisora de competir directamente con la Cadena COPE, y Onda Cero, quienes tienen espacios de similares características desde las 8 de la tarde hasta las 12 de la noche. Todos ellos, coinciden en tener una estructura parecida, en la que se suele dividir el programa en una primera hora dedicada a las noticias del día y también las deportivas; una segunda hora con humor e información económica y las dos últimas dedicadas a tertulia y debate.

Muchos conoceréis a Barceló por presentar los informativos de Telecinco hasta hace dos años. Desde entonces, estuvo al frente de A vivir que son dos días, espacio que consiguió revitalizar y dar un nuevo enfoque. En televisión, se hizo famosa por conducir el informativo que más tiempo dedicaba al Prestige y a la Guerra de Irak. En nuestra retina, quedan las conexiones en directo de la catalana con Jon Sistiaga, corresponsal en Irak, y como no, la fatídica muerte del cámara José Couso mientras cubría esta guerra.

Los informativos que ella presentaba, bajo la dirección de Juan Pedro Valentín, sin duda alguna, se pueden considerar como los mas progresistas de aquella época. O al menos, los más alejados con las tesis del Gobierno de Aznar. En unos tiempos en que el Telediario de TVE estaba en manos de Urdaci, mientras que Antena 3 intentaba dar un enfoque ciudadano y comercial y sin la existencia de Cuatro y la Sexta, los informativos de Barceló eran algo distinto en aquel panorama televisivo.

En A vivir que son dos días desarrolló una gran labor de renovación, mostrando una gran capacidad para tratar temas que a priori pueden ser minoritarios y cultos, como determinados libros, música y exposiciones; y acercarlos al oyente, quien se quedaba escuchando aunque no hubieses leído los libros, visto las películas o visitado las exposiciones de las que allí se hablaban, simplemente por la capacidad comunicativa de su presentadora